Ya en 2011 hablamos en este blog de Airborne 44. Fue a raíz de una visita a la vecina Francia, donde constatamos el empuje que estaba viviendo el género bélico, tanto en lo referente a las sempiternas series de aviación —tan populares en el mercado franco-belga— como respecto de álbumes que traían enfoques inéditos y aires de renovación al género, caso de Stalingrad Khronika, de Sylvain Ricard y Franck Bourgeron.
El bélico fue durante décadas uno de los géneros más boyantes del cómic mundial, sobre todo en el mercado español e inglés, nutrido éste último por un puñado de autores españoles, no lo olvidemos. En Francia también tuvo gran aceptación, sobre todo en el petit format y con dibujantes como Félix Molinari.
Con todo, si la aviación cuenta en la BD clásica, la surgida de las grandes cabeceras (Spirou, Tintin, Pilote...), con una lista de ejemplos ilustres, el género bélico más ortodoxo, el que describe el cuerpo a cuerpo, las escaramuzas y batallas de la infantería, no anda sobrado de títulos de referencia. Sin duda, de entre toda la nueva hornada, Airborne 44 está llamada a ocupar ese lugar, pieza ineludible en un futuro canon del cómic bélico franco-belga.
Ello se debe de forma muy evidente gracias a la pericia a los lápices, y el pincel, de Philippe Jarbinet. Su gusto por las técnicas clásicas, y, por qué no decirlo, las consideradas más artísticas dentro de nuestro acervo, traen un acabado novedoso a un género que solía decantarse por otro grafismo. Así, Jarbinet dibuja y entinta con gran detalle, confiando finalmente en su portentoso uso de la acuarela un color final que adquiere un protagonismo muy acusado. Al igual que con Jean-Pierre Gibrat (La prórroga, Mattéo), dibujante con el que comparte un gran parentesco estilístico, la acuarela se erige en el elemento definitorio de Airborne 44.
Para las secuencias más intimistas aporta un enfoque preciosista, delicado, evocador, y a las que transcurren en la nieve les da una pátina de autenticidad.
La planificación, como el aliento que recorre a esta serie, es muy clásica. Sólo en contadas ocasiones, como en la siguiente plancha (18, del segundo álbum), se permite alguna licencia más renovadora, como dejar algunas viñeta sin marco, por lo cual un manto nevado envuelve la página.
Concebida como una serie de tan sólo dos álbumes, "Allí donde caen los hombres" y "Habrá un mañana sin nosotros", finalmente recabó tanto éxito que Jarbinet la está continuando siguiendo el esquema de ciclos de dos álbumes. La editorial Netcom2 ha presentado en castellano el primer ciclo en un volumen integral.
Respecto del primer integral, si la excelencia gráfica era la principal baza de Airborne 44, no puede dejar de alabarse la calidad de un guión que, sorprendentemente, es capaz de conciliar tanto a los aficionados al bélico como a aquellos lectores que no sienten una predilección especial por el género. El caso es que, mediante una compleja estructura de flashbacks, e introduciendo hechos históricos alejados de la clásica "hazaña bélica", Jarbinet consigue atrapar al lector, mediante subtramas entrecruzadas, en las que los personajes ganan peso y adquieren vida propia, y una historia, columna vertebral, sobre la que irán encajando todas las demás con notable pericia.
Desde luego, Jarbinet transmite a la perfección la desorientación que conllevó la batalla de las Ardenas, sin un frente delimitado y con la nieve omnipresente, aparte de recrear perfectamente el paisaje, no en vano su comarca natal. Si enumeramos las características de este primer ciclo como un todo —dibujo realista acabado en acuarela, renovación del género sin renegar de los presupuestos clásicos, puntillosa recreación del paisaje y armamento, delicada construcción de personajes—, concluimos que Airborne 44 es uno de los títulos imprescindibles de los últimos años y que testimonian la capacidad del cómic para renovar géneros que se creían agotados.
También en Mis cómics y más:
OMAHA BEACH (Netcom2), segundo ciclo de AIRBORNE 44, por Philippe Jarbinet
Gracias por estupenda reseña, Pablo. No soy especialmente aficionado a las historias de guerra, pero aun así, gracias a esta entrada, se me despierta el interés por esta obra. El video es toda una master class, y una muestra excepcional del poder del dibujo artesanal y la acuarela en esta época de preponderacia de las nuevas tecnologías.
ResponderEliminarA mí sí que me gustan mucho las historias bélicas, pero es cierto que hay otros aficionados -sobre todo lectoras- que no les interesa tanto este género.
ResponderEliminarSin embargo, este primer integral gustará mucho a todo tipo de lectores, incluidos los que no son aficionados al género y los más reticentes.
Básicamente, y no cuento más para no destripar la trama, si te gustan las historias de la Gestapo, espionaje o de las SS persiguiendo a opositores al III Reich, te sorprenderá esta historia.
Este hombre es magistral. Me ha encantado el vídeo.
ResponderEliminarTambién me gusta el genero bélico, sobre todo si esta bien documentado, como es el caso.Hace un tiempo que lo tengo en el punto de mira, pero de momento mi bolsillo no llega a todo :( ... Este caerá tarde o temprano.
Gracias por la entrada y sobre todo por el vídeo.
Desde luego, está bien documentado. De hecho, hay varias imágenes suyas junto a tanques y jeeps de la época.
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