El blog de José Luis Povo

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jueves, 13 de agosto de 2009

NOS VAMOS DE VACACIONES


Ya echamos definitivamente el cierre por vacaciones. Salgo de viaje a un lugar donde no habrá ordenador, ni internet, pero sí comics que leer. A la vuelta se me avecina un mes de septiembre apretado en cuestiones de trabajo, pero a pesar de la cuesta, poco a poco el blog irá volviendo a recuperar el pulso.


Gracias a todos por estar ahí.


miércoles, 5 de agosto de 2009

"Mis comics y mas" cumple medio año


Como quien no quiere la cosa, el próximo día 22 este blog cumplirá seis meses de existencia. Me adelanto a la fecha porque me pillará de vacaciones.

Sólo puedo agradecer vuestra participación y la acogida que ha tenido el blog en este casi medio año de andadura. La verdad es que la respuesta ha sido muy superior a lo que me esperaba, por no hablar de la extraordinaria aportación y entusiasmo de los colaboradores fijos (Joaquín y Turnstiles) o esporádicos (Rafa aw), que habéis ido enriqueciendo el blog y haciéndolo crecer.

He comprobado con satisfacción que, aparte de los amigos a los que he ido provocando o rescatando en otros sitios de la red, hay quien ha dado con nosotros un poco por casualidad o por medio de los buscadores, y algunos habéis llegado para quedaros.Un saludo especial para los del otro lado del charco.

También me ha sorprendido para bien el interés que siguen despertando algunos comics que a veces parecen olvidados.

Por lo que a mí respecta, vuestros comentarios sobre mis comics me han supuesto un apoyo que ha hecho renacer mi vocación de historietista que, aunque aletargada, seguía llevando dentro. También he tenido la oportunidad de aprender muchas cosas de todos los que, a través de vuestros comentarios, habéis ido aportando correcciones, información o simplemente vuestro punto de vista, siempre enriquecedor.


Saludos!!

José Luis Povo

lunes, 3 de agosto de 2009

viernes, 31 de julio de 2009

TIF Y TONDU, por Will



Ha sido poco lo que hemos conocido en español de la serie Tif y Tondu, de Will: sólo dos historietas, que yo sepa, que pudimos leer en las páginas de la revista Spirou ardilla:("Aventura en Birmania” y “Tif y Tondu en Nueva York”) y que nunca llegaron a publicarse en forma de álbum.
La serie original consta de 39 álbumes dibujados por Will, mas una continuación que consta de 6 álbumes más, obra de Alain Sikorski y Denis Lapiere.
Los comienzos de Tif y Tondu se remontan a 1938, cuando en las páginas de la revista Spirou apareció “Aventures de Tif”, con guión y dibujo de Fernand Dineur. Al poco, Tif conoció al capitán de barco Tondu y se enrolaron juntos en viajes por el mundo.
En 1949 Dineur pasa el testigo del dibujo a Will y continúa haciendo los guiones, que después pasarían a Henri Gillain(Luc Bermar) y Albert Desprechins (Ben), hasta la llegada de Maurice Rosy en 1955, que escribió 12 álbumes, iniciando lo que se considera la etapa dorada de la serie. A partir del álbum 16, pasó a escribir los guiones Maurice Tillieux. Finalmente, en los años 80 , se hizo cargo Stephen Desberg, discípulo de Tillieux, que continuó en la serie hasta 1991.
De la etapa de Rosy acabo de leer “Tif rebondit” que es la continuación de “La materie verte”, y me ha parecido que Rosy le daba a la serie un aire algo más desenfadado que el que tuvo después con Tillieux. Baste con decir que en esta historieta, Tif, tras habérsele administrado una sustancia experimental , “la materia verde”, adquiere la facultad de rebotar al caer desde edificios en altura, alargar sus miembros como si fueran de chicle, etc. Tif y Tondu pondrán todo su empeño en que este descubrimiento no caiga en manos de una peligrosa potencia extranjera que se propone utlizarlo con fines militares.
De la etapa de Rosy hay que destacar el personaje del malvado Monsieur Choc. De los 5 tomos integrales editados por DUPUIS, organizados temáticamente, se le dedican dos a este villano de imagen extravagante, siempre vestido de esmoquin, fumando y con la cabeza cubierta por un extraña máscara o yelmo metálico.
Al tomar la pluma Tillieux, la serie adquirió un carácter más policíaco o de novela negra. Tillieux incluyó cadáveres, tiroteos, asesinos a sueldo y demás elementos que la censura no le había permitido años antes incorporar a sus comics de Gil Jourdan. Recuerdo que me llamó la atención cuando leí esas aventuras en Spirou ardilla que, sin desentonar en cuanto al estilo de dibujo, eran más crudas y más serias que la mayoría.
Aventura en Birmania narra una expedición arqueológica en la que está infiltrado un traidor. El ambiente de tensión se respira a lo largo de toda la aventura. Es un thriller en toda regla, en el que la falta de escrúpulos de los villanos se muestra abiertamente. Vemos morir a gente, a diferencia, como comentaba, de historietas publicadas en décadas anteriores en la revista spirou , en las que por lo general las villanías se centraban en robos o secuestros y no solía aparecer nunca un cadáver. Como en muchas obras de este género, los personajes están poco definidos, como vacíos, siendo el desarrollo de la acción y la intriga lo que importa.
En Tif y Tondu en Nueva York se nos cuenta una historia de lucha entre dos bandas mafiosas de la ciudad, pugnando por un nuevo invento que permitiría facilitar el tráfico de heroína, introduciendo impunemente en el país grandes cantidades de dicha droga, camuflada como si fuera papel. (según se dice en el propio cómic, esto está basado en un hecho real).
Por una casualidad, esta historia involucra a nuestros dos amigos. La narración se desarrolla de forma que el punto de vista no es siempre el del protagonista, mostrando una sucesión de hechos que involucran a distintos personajes y en distintos lugares; este estilo de narración me resulta bastenate cinematográfico y me recuerda más a algunas películas de los 70 que a los comics de, por ejemplo, Spirou y Fantasio o Tintín.
La historia mantiene el interés y las escenas de acción están bien contadas.
Algo que me gusta del estilo de dibujo de Will es su forma de representar los coches, edificios, objetos,etc., bastante realista pero que casa bien con el estilo caricaturesco de los personajes. El conjunto es eficaz y expresivo. Favorece la legibildad (la “lisibilité“ que decía Hergé), y no cansa a la vista. Esto es algo que personalmente siempre agradezco y me hace preferir, por ejemplo, las historias de Tif y Tondu a las de Jess Long, también con guión de Tillieux pero dibujadas en un estilo más realista y oscuro por Piroton.
La influencia de Franquin es patente en la primera época, pero después Will desarrolla su propio estilo, incorporando otras influencias como la de Tillieux.
De los últimos álbumes de Will, guionizados por Desberg, cabe señalar que incluyen algunos temas de carácter más político y social que en los anteriores.
La última etapa, de Sikorski-Lapiere ha recibido malas críticas, por haber derivado hacia historias de detectives un poco tópicas ; gráficamente, por lo que he visto, se alejan bastante del estilo de Will.
Integrales publicados por DUPUIS
1 Le diabolique M. Choc. 03/2007
2 Sur la piste du crime. 09/2007
3 Signé M. Choc Dupuis. 03/2008
4 Échec aux mystificateurs. 08/2008
5 Choc mène la danse. 03/2009
Tebeografía en castellano
Aventura en Birmania: Spirou ardilla del nº 15 al 31.
Tif y Tondu en Nueva York: Spirou ardilla del 50 al 58

martes, 28 de julio de 2009

LEFRANC:"LES ENFANTS DU BUNKER",por Maury y Jacquemart (avance)




Os ofrezco un avance del álbum de Lefranc que están preparando Michel Jacquemart (guión) y Alain Maury (dibujos), que se titulará "Les enfants du bunker" y se publicará en el 2.010. La viñeta en blanco y negro la ha colgado el propio Jacquemart en el foro "Alix, Lefranc, Jehn et les autres", al cual tenemos vínculo por aquí en "sitios webs amigos".
A Jacquemart le debemos el guión de "Le mâitre de l'Atome" de la misma serie.
Maury se ha hecho cargo de la continuación de series clásicas como Johan y Pirluit y los 4 ases, lo que prueba la versatilidad de su dibujo y hace esperar un resultado de calidad, como atestiguan estas primeras viñetas.

lunes, 27 de julio de 2009

REGRESOS A LA ALDEA GALA




En el año 50 a. de J.C., toda la Galia estaba ocupada por los romanos, excepto una pequeña aldea de irreductibles. De ella se ha escrito mucho y, sin embargo, o precisamente por ello, venía siendo la gran ausente de este blog, pues dentro de las series clásicas franco-belgas, nos hemos ido centrando quizás en otras menos conocidas. Pero creo que iba siendo hora dededicar una entrada a Astérix, aunque sólo sea para aportar una visión personal. En mi familia siempre ha estado muy presente el galo de los bigotes amarillos, desde que tengo uso de razón. Existía un ejemplar de cada uno de los álbumes, que habían ido comprando mis hermanos mayores, y yo recogí el testigo con “La gran Travesía” y a partir de ahí me “encargué” de completar la colección, haciéndome con Obélix y Compañía y Astérix en Bélgica. Después vino la lementable pérdida de Goscinny en el 77, La Gran Zanja, que a todos nos pareció muy flojo, y finalmente “La odisea de Astérix” que nos decepcionó ya por completo a toda la familia. Aun así, ya sea por seguir la tradición o porque no había perdido del todo la fe en que Astérix remontara, fui comprando el resto de los álbumes que fue haciendo Uderzo en solitario. Ya he manifestado en repetidas ocasiones que me pareció un gran error por parte de Uderzo el no recurrir a la colaboración de uno o varios buenos guionistas para continuar la serie. El tiempo me han dado, a mi pesar, la razón, creo.
Pero ahí están los 24 álbumes firmados por Uderzo y Goscinny, que constituyen una colección de las que hay pocas en cuanto a calidad del guión y del dibujo, y que me han hecho pasar ratos inolvidables. Mis regresos a la aldea gala son periódicos, y las estancias, largas, pues en cuanto agarro uno cualquiera de los 24, inicio un viaje del que no regreso hasta no haber acabado el último de ellos, cada vez por un orden distinto. (No se por qué pero presiento que no falta mucho para el siguiente regreso).
Creo que es una serie que fue ganando con los años. La pluma de Goscinny se iba afilando en complejidad, ironía, guiños a nuestra sociedad actual, enriquecimiento de los personajes y hasta diría cariño del autor hacia ellos. Y todo eso partiendo de un debut, Astérix el Galo, que estaba ya un nivel alto, y que a mi me sigue pareciendo desternillante. Uderzo, a su vez, que ya era un espléndido dibujante, creció como artista a lo largo de la serie, y su dibujo se fue enriqueciendo en detalles sin perder un ápice de su carácter expresivo y caricaturesco. Goscinny y Uderzo,dos cómplices, grandes amigos según se cuenta, cuya conjunción de talentos fue mágica.
Lo bueno de estos viajes es que Astérix, como ya se ha comentado en multitud de ocasiones, tiene varios niveles de lectura. Desde la infantil a la adulta, y cada vez descubre uno cosas nuevas. Temas como la especulación inmobiliaria (“la residencia de los dioses”) o la creación por el mercado de falsas necesidades (“Obélix y Compañía”) ya estaban ahí,y las percibía de pequeño, pero ahora me hacen más gracia.
Y qué decir de lo que hemos aprendido sobre la antigua Roma a través de los libros de Astérix. La Roma de Astérix es una mezcla de nuestro mundo actual con lo que se conoce de lo que fue aquella civilización. Probablemente no hubo en Roma nunca ningún atasco de carros como el que aparece en Astérix, tan parecido a las caravanas de las autopistas actuales, por poner un ejemplo. Pero una y otra vez Goscinny juega con el efecto, que siempre le resulta, de transportar a la Roma del año 50 a.d. J.C. esos detalles cotidianos actuales. Aún con todo, los niños, a diferencia de los que creen algunos autores y editores, no son tontos, y saben distinguir perfectamente, en mi opinión, lo que hay en Astérix de fantástico, imaginario o anacrónico de lo que son aspectos de la realidad de la época romana. Por eso digo que al final aprendimos cosas leyendo Astérix y a mi, al menos, me motivó a interesarme por la historia real de Roma.
Os dejo con la imagen de un del magnífico mural que tuve ocasión de ver en Bruselas, y una del Parque Astérix de París, al que no me pude resistir a ir a finales de los 80(aunque uno ya estaba crecidito cuando se inauguró).

RAMON DE ESPAÑA, guionista de cómics




En algunas ocasiones se ha hablado en este foro de la influencia que Ramón de España (Barcelona, 1956) pudo ejercer en nuestros gustos tebeísticos, con sus artículos en la desaparecida revista “Cairo” y su decidida reivindicación de la escuela franco-belga y la denominada línea clara. He de reconocer que desde entonces, primeros ochenta, he sido un seguidor fiel de cuantas apariciones efectuaba este prolífico periodista, escritor, traductor, director de cine, crítico musical y guionista de cómics. Es a esta última faceta a la que haré referencia en esta entrada, pese a que sólo tangencialmente tiene relación con el contenido fundamental de este blog.

“LA NOCHE DE SIEMPRE” y “FIN DE SEMANA”

Con dibujos en blanco y negro de Montesol (Barcelona, 1952), Ramón de España reflejó en estos dos álbumes las vivencias de un grupo de personajes característicos de los primeros años de la transición y de lo que se dio en llamar la “movida”, aunque en este caso es catalana y no madrileña. Se trata de jóvenes con ínfulas artísticas y pose snob que se dedican fundamentalmente a vivir la noche, beber, experimentar con drogas y hacer patente su desorientación vital y sus fracasos sentimentales. Todos tienen grandes proyectos en ciernes (musicales, literarios, cinematográficos, pictóricos, etc.) pero en realidad casi ninguno ve la luz. Nueva York o Londres aparecen ante sus ojos como los verdaderos paraísos de la modernidad, a diferencia de sus ciudades provincianas y aburguesadas.
Aunque las historias son independientes, ambas reflejan el mismo ambiente o círculo social, dándose la circunstancia de que algunos personajes aparecen fugazmente en ambos relatos. Al releerlos para hacer esta entrada, veo ciertas concomitancias con alguno de los álbumes de Gérard Lauzier y no dejan de hacerme gracia las poses de los modernos de la época, pese a que ahora pueden parecer bastante ridículas. Creo que se pueden ver como un documento social más de una época ya desaparecida, con muchos guiños a personajes reales más o menos conocidos.
“La noche de siempre” apareció por entregas en la revista Bésame Mucho durante 1981, siendo recopilada en forma de álbum por Producciones Editoriales en 1982.
“Fin de semana” se publicó por episodios en Cairo en 1982, siendo Laertes quien publicó el álbum en 1983.

“VELVET NIGHTS”

Posiblemente el guión de “Velvet nights” sea el mejor de los realizados por Ramón de España. Se trata de un relato cercano a la serie negra y con numerosos homenajes a muchos clásicos del cine. Víctor Vergara es un jugador profesional que se gana la vida como tahúr en un casino situado en un pequeño Principado europeo. Es un hombre escéptico y desarraigado que intenta olvidar, sin conseguirlo, su turbio y doloroso pasado, al principio como luchador antifascista y al final como terrorista. De pronto aparece en escena Al Pagani, un famoso cantante y actor americano, aficionado al juego y a la bebida, caprichoso, violento y con contactos con la mafia. Pagani viene acompañado de su “amiguita” Daisy, hermosa y un poco tonta, a quien ha prometido hacerla triunfar en Hollywood. Como era de esperar el cantante y el jugador rivalizarán en el amor y en el juego, con el fondo de la voz en off de Víctor Vergara y las canciones de Al Pagani, entre las que destaca la que da título al álbum, “Velvet nights”. Es de destacar como en todos los álbumes de Ramón de España aparecen letras musicales de fondo, a modo de imaginaria banda sonora,acompañando cada secuencia.
La parte gráfica corre a cargo de Sento (Valencia 1953), uno de los máximos exponentes de la Nueva Escuela Valenciana (Daniel Torres, Mique Beltrán, Micharmut). El dibujo estilizado y elegante que, a veces, me recuerda a determinadas estampas taurinas, tiene el añadido del color que le da una apariencia mucho más vistosa al conjunto.
De nuevo la historia apareció durante 1984 serializada en Cairo, siendo editada por Norma en tapa dura en 1985.

EL AMOR DUELE

Hubieron de pasar muchos años para que volviéramos a ver a Ramón de España en los créditos de un álbum de cómics. En 1997, con dibujos de Keko (Madrid, 1963) apareció “El amor duele” publicado por Glénat y que parece ser la primera aventura de un investigador privado llamado Brendan Beckett. El protagonista, ex-policía de origen irlandés algo psicópata y católico a ultranza, se enfrenta a una trama en la que se mezclan la búsqueda de una mujer desaparecida, las snuff movies, el asesinato de un locutor radiofónico, un político corrupto y depravado, una novia a la que Brendan “respeta” demasiado y que en el pasado flirteó con el cine porno … Desde mi punto de vista, demasiados elementos para que el argumento encaje sin estridencias. Por otro lado, el sorprendente final hace presagiar ciertas dificultades para que las aventuras del Sr. Beckett continúen. El dibujo a color de Keko, con ciertas influencias de Charles Burns, es muy adecuado para reflejar el cada vez más enloquecido argumento. Pese a que no es uno de mis favoritos, supera la media de los cómics realizados en España.

EL SUEÑO DE MEXICO

“El sueño de México” aparece en 2004 con dibujos de Bartolomé Seguí (Palma de Mallorca, 1962), publicado por Edicions de Ponent en la Colección Mercat. El regreso al blanco y negro parece presagiar la vuelta de los personajes que veíamos en “La noche de siempre” y “Fin de semana” pero con veinte años más. Nos encontramos, por un lado, con Carlos, novelista frustrado y publicista con problemas de alcoholismo motivados por el abandono de su mujer, y por otro, con Oscar, antiguo cantante de “Víctor Hugo y los Miserables”, que ha visto morir de sobredosis a muchos de sus amigos y que un día desapareció para enrolarse en un barco mercante. El reencuentro de los antiguos colegas desemboca en una especie de road movie, cuyo destino final parece ser un recóndito lugar de México, aunque realmente sea Menorca. El presunto carácter intimista de la obra se ve mediatizado por el robo de una obra de arte y la persecución por parte de dos matones que quieren recuperar su botín. Para mí, esta mezcla de acción y costumbrismo, localismo y americanismo, chirría un poco, aunque es de aplaudir la intención de realizar una novela gráfica adulta y autóctona. El dibujo de Seguí destaca especialmente cuando nos muestra distintas estampas de Barcelona y Menorca y nos traslada la sensación de movimiento sin destino fijo del coche descapotable de nuestros protagonistas.

A estos cinco álbumes habría que añadir la serie inacabada titulada “Los fabricantes de estrellas”, con imágenes de Roger y publicada por entregas en 1985 y 1986 en las revistas Complot y TBO (del sello Bruguera) y que, por desgracia no conozco.